En la revista Estampas salió publicado, este domingo, el resultado de la cata de mantequilla, a la que la gentil Adriana Gibbs me invitó. Fue una deliciosa experiencia que agradezco, donde además conocí el Café Noisette y a Maurizio Greggio, de la panadería Ducal; a Marca Manceau, anfitrión; y a Brian Van der Broucke, de La Praline.
.http://www.estampas.com/2011/03/13/que-mantequilla.shtml?sms_ss=email&at_xt=4d7d69ab40e26faa%2C0
lunes, 14 de marzo de 2011
martes, 8 de marzo de 2011
Yo quiero uno !
domingo, 2 de enero de 2011
Feliz Año 2011, y a comer mantequilla !
Qué maravilla el primer regalo que me da el 2011: una mantequilla nacional de calidad. Fui a buscar una de las mantequillas importadas que suelo usar, y decidí arriesgarme con la única del patio que no había probado: La Paisana sin sal. Grata fue la sopresa, al hacerle pasar examen sobre una rebanada de pan recién tostado. Pasó todas las pruebas: color, textura. olor y sabor . BRAVO !
viernes, 17 de diciembre de 2010
Estambul en mis manos !
La Factoría me ha hecho muchos regalos, entre ellos los amigos, y entre los amigos The Gomez, que son Helena y Florencio. Comensales que disfrutan cada bocado de los platos que piden en mi mesa y tienen la gentileza de preguntar qué quiere uno si se van de viaje. Florencio suele hablar de los polvos mágicos que pongo en la comida.
Antes de iniciar un periplo por el Medio Oriente del mundo preguntaron que quería. Dije que un sobrecito de alguna especie preparada para un plato salado o dulce, cualquiera se agradece. Hoy fueron a visitarme con ese cariño y ese calor que puede ser más fuerte que el de la cocina. Una vez más cubría yo la vacante de la cocinera, que no apareció, y no podía sentarme con ellos a oír los cuentos del viaje. Hasta la puerta de la cocina llegó Helena requiriéndome. Se tuvieron que ir. Los cuentos quedaron para otro día. Para mi conmoción me dejaron una bolsita con dos presentes, dos pedacitos de esas lejanas tierras - o tres, la bolsita era la original y dice Ucuzcular, Estambul 1886 (la tienda tiene más de cien años). Me regalaron azafrán y vainilla. Creo que, en carne - como decía mi hermano de pequeño - nunca había visto tanto azafrán junto. La cajita es inmensa, valga la contradicción, y la astillita de vainilla viene en su tubito. Es algo que hace tiempo no vemos por aquí. Prometo preparar algo que permita disfrutar cada hebra de ese azafrán, que viajó desde tan lejos hasta mis manos, y perfumar un rico postre con esa vainilla pronto, muy pronto.
Antes de iniciar un periplo por el Medio Oriente del mundo preguntaron que quería. Dije que un sobrecito de alguna especie preparada para un plato salado o dulce, cualquiera se agradece. Hoy fueron a visitarme con ese cariño y ese calor que puede ser más fuerte que el de la cocina. Una vez más cubría yo la vacante de la cocinera, que no apareció, y no podía sentarme con ellos a oír los cuentos del viaje. Hasta la puerta de la cocina llegó Helena requiriéndome. Se tuvieron que ir. Los cuentos quedaron para otro día. Para mi conmoción me dejaron una bolsita con dos presentes, dos pedacitos de esas lejanas tierras - o tres, la bolsita era la original y dice Ucuzcular, Estambul 1886 (la tienda tiene más de cien años). Me regalaron azafrán y vainilla. Creo que, en carne - como decía mi hermano de pequeño - nunca había visto tanto azafrán junto. La cajita es inmensa, valga la contradicción, y la astillita de vainilla viene en su tubito. Es algo que hace tiempo no vemos por aquí. Prometo preparar algo que permita disfrutar cada hebra de ese azafrán, que viajó desde tan lejos hasta mis manos, y perfumar un rico postre con esa vainilla pronto, muy pronto.
sábado, 20 de noviembre de 2010
Buen viaje Joseíto !

He regresado después de un acontecimiento que marca un antes y un después. José El Enano Rodríguez, mi esposo, cómplice y socio en la Factoría del Enano, se fue a montarle los eventos a San Pedro. Una nueva estapa se abre ante mí. No tengo ganas de escribir balances o biografías, todo a su tiempo. Postearé sí una foto, tomada por mi amigo y colega cocinero Juan Alonso Molina, que creo que refleja mucho de lo que éramos. Aclaro, no es mi mejor foto, sé que no le gustará mucho a mi querido Fran Beaufrand, pero es el retrato de un momento preciso de mi vida.
domingo, 9 de mayo de 2010
El pan de mi tía María es el más rico del mundo !

Desde que tengo uso de razón celebro la llegada a mis manos del pan de leche, las rosquitas cubiertas, las empanadas de guayaba, los suspiros, el pan aliñado y otras delicias que salen de ese horno de leña que está al final de la calle Unión de La Asunción. Y forman parte del acervo gastronómico margariteño. Pueden comprarse en la puerta de la casa o a las vendedoras, que con sus cestas se ubican en varias plazas de Margarita. Son varias las vendedoras informales, que en sus inmensas cestas ofrecen a los transeúntes toda la tradición dulcera de la isla.

Recuerdo, con la misma sorpresa del momento, la imagen de mi tía batiendo manualmente una docena de claras de huevo para los suspiros, a sus ayudantes amasando y armando los panes, el pan saliendo del horno de leña. Iniciando mis estudios de periodismo decidí estrenar mi primera cámara con ella haciendo pan, buscando plasmar esas imágenes con las que había crecido. Al mejor estilo antropóloga/fotógrafa, me le presenté en su casa una Semana Santa, después de recorrer el espacio le dije dónde me gustaría que se ubicara para tomarle las fotos. Con pasmosa tranquilidad me dijo: “mija y tú me vas a fotografiar a mí, así tan fea y acalorada”. Fin de la sesión fotográfica.
miércoles, 5 de mayo de 2010
Hoy 5 de mayo, conversatorio en Yamin Gourmet !
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